Tipos de moldes:
- Estándar: Con unas medidas habituales de 9×5 o 8×4 pulgadas, estos moldes son perfectos para las clásicas barras de pan.
- Mini: Versiones más pequeñas, ideales para raciones individuales o recetas de lotes más pequeños.
- Especialidad: Diseñados con formas únicas como redondos u ovalados, estos moldes añaden creatividad a tu repostería.
Materiales:
- De aluminio: Ligeras y económicas, las sartenes de aluminio distribuyen el calor uniformemente, garantizando unos resultados de horneado uniformes.
- Acero inoxidable: Duraderas y resistentes al calor, las sartenes de acero inoxidable son las favoritas en las cocinas profesionales por su dureza.
- De silicona: Flexibles, antiadherentes y fáciles de limpiar, las sartenes de silicona son ideales para hornear alimentos delicados sin que se peguen.
Factores clave para elegir un molde para pan:
- Tamaño: Seleccione el tamaño adecuado para su receta para evitar el desbordamiento o el llenado insuficiente.
- Material: Dependiendo de lo que vayas a hornear, elige un material que se adapte a tus necesidades: aluminio para una rápida conducción del calor, acero inoxidable para mayor durabilidad o silicona para mayor comodidad.
- Revestimiento antiadherente: Las sartenes antiadherentes evitan que se peguen y facilitan la limpieza.
- Altura del borde: Los moldes para pan con bordes más altos pueden ayudar a minimizar los derrames y el desorden.
Consejos de cuidado y mantenimiento:
- Lavar a mano: Limpiar con agua y jabón suave para conservar la superficie de la sartén.
- Evite los abrasivos: Evite los estropajos abrasivos para evitar arañazos.
- Seque a fondo: Asegúrese de que el recipiente esté completamente seco antes de guardarlo para evitar que se oxide o se dañe.
- Cuidado con la temperatura: Evite los cambios bruscos de temperatura que puedan provocar deformaciones.